El domingo pasado no, el anterior, comenzamos una de las semanas mas complicadas para mi desde que soy tu mamá.
Regresamos de casa de la abuela Pili el día anterior y por la noche tuviste fiebre que no venia acompañada de ningún otro síntoma y que tratamos de la manera habitual. El lunes todo empeoró, tu boquita no estaba nada bien, desde lejos y sin tocarte podíamos ver tu encía inflamada y un par de aftas al sacar la lengua. Lógico que ese fuese tu quinto día son comer.
El martes acudimos al pediatra que te recetó un antibiótico y una crema fungicida bajo el diagnostico de Gingivitis grave. Me chirrió, pero poco tengo de medico yo así que acaté y, pese a mi gran adversion por los medicamentos cumplimos a la perfección con las pautas dadas por 1 día y medio, 5 tomas de antibiótico para ser exactos, hasta que no puede soportar mas que tu boquita sangrase terrible y abundantemente, cual matanza de Texas, con cada antibiótico.
El sangrado era desmesurado e iba en aumento progresivo con cada toma y tus alaridos de dolor me partían el alma.
Eso no es normal.
Decidimos pasar el jueves santo en el hospital y para allí salimos a las 7 de la mañana.
Al llegar hubo rápido diagnostico. Mujer joven, madre primeriza. DIAGNOSTICO: Madre loca y preocupada en exceso. El tuyo tardo algo mas. Tuve que enfadarme y sacar a relucir mi genio, vacilar de mis conocimientos "médicos" gracias a mi trabajo y de tener una madre con alergia a la penicilina para que me hiciesen algo de caso. Me sentí muy decepcionada por nuestro sistema de salud :(. Finalmente lo llamaron Estomatitis.
Finalmente nos cambiaron el tratamiento y desde entonces las cosas van considerablemente mejor. Aunque no bien del todo, a mi parecer, porque continua habiendo un pequeño sangrado que va mas allá de lo natural de una gingivitis y coincide con la toma del antibiótico. Tu boquita ya no está tan inflamada y las aftas han desaparecido. Ayer pediste comida y, después de 11 día a base de leche y yogur, te referías a una salchicha y un filete de carne. Te lo comiste junto a dos yogures de postre (¡de los grande! como a ti te gustan).
Recupérate pronto Mimi porque verte así me parte el corazón. Y es que...
No hay dolor mas grande que que le duela cualquier cosa a un hijo.
¡Buena semana! :D
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